El triple vencedor del Tour de Francia tuvo en el podio de los Campos Elíseos un recuerdo emocionado para las 84 víctimas del atentado de Niza y dedicó el triunfo a su hijo Kellan, presente en la ceremonia en brazos de Michelle, la esposa del campeón.
“Este Tour ha tenido lugar en el contexto de los terribles acontecimientos en Niza y quiero mostrar mis respetos, una vez más, a aquéllos que perdieron sus vidas y sus familiares”, dijo.
Chris Froome expuso su idea de utilizar los valores del deporte y del Tour para combatir “estos hechos impredecibles”.
“Estos acontecimientos ponen al deporte en perspectiva y debemos demostrar por qué los valores de éste son tan importantes para tener una sociedad libre para todos. Nos gusta el Tour de Francia porque representa esos valores y siempre seguirá esa línea”, señaló.
Un mensaje de resistencia que Froome completó alabando la filosofía y el encanto de la carrera francesa.
“Nos encanta el Tour por la pasión de los aficionados de todas las naciones que lo siguen, por la belleza de la campiña francesa y los lazos de amistad que se crean a través del deporte. Estas cosas nunca cambiarán”.
Quien no pudo ocultar las lágrimas fue Michelle, la esposa del triple ganador del Tour.
“Este Tour también es de Michelle, mi esposa, y mi hijo, Kellan, porque su amor y apoyo hacen que todo sea posible. Kellan, esta victoria es para ti”, concluyó.