Manifestantes bloqueaban el viernes algunas calles de La Paz para pedir una auditoría de los resultados de una elección que otorgó un cuarto mandato consecutivo al presidente Evo Morales, sin necesidad de una segunda vuelta, y que la oposición considera un fraude.

 

Morales, electo por primera vez en 2006 y el primer mandatario de origen indígena del país, sostiene que alcanzó la victoria en los comicios del domingo pasado y que la oposición intenta dar un golpe de Estado.

 

Las protestas comenzaron desde el domingo, cuando se suspendió un recuento oficial de votos por casi 24 horas, mientras Morales, de 59 años, aseguraba que su Movimiento al Socialismo (MAS) obtendría un triunfo en primera vuelta, pese a que los datos iniciales apuntaban a que se necesitaría un balotaje en diciembre.

 

«Tiene que haber una segunda vuelta (…) el árbitro electoral lamentablemente no es confiable», dijo el viernes Marco Antonio Fuentes, asambleísta departamental en La Paz, al referirse a la súbita interrupción de datos el domingo que generó las dudas sobre el resultado.

 

El expresidente y candidato opositor por Comunidad Ciudadana, Carlos Mesa, de 66 años, dijo el viernes al canal Unitel que «el Gobierno está despreciando el voto popular, el Gobierno está despreciando las gigantescas movilizaciones en todos los departamentos del país (… y) un paro indefinido que se cumple rigurosamente».

 

El equipo de observadores oficiales de la OEA había recomendado el jueves que Bolivia convoque una segunda vuelta después de la interrupción inesperada del conteo de votos y el cambio repentino de tendencia en favor de Morales, lo que provocó una airada reacción del mandatario.

 

El viernes por la mañana se reportaba el cierre de algunas vías en el norte y sur de La Paz, pero sin incidentes violentos hasta el momento, según testigos Reuters.

 

El director de la Unidad Operativa de Tránsito de La Paz, Abel Claros, dijo que la ciudad amaneció con bloqueos concentrados fundamentalmente en la zona sur, en protesta por los resultados de las elecciones generales. «En la zona central, la situación es casi normal», afirmó a periodistas.

 

El recuento de votos, prácticamente finalizado, mostró en la noche del jueves que Morales obtuvo el 47,07% de los votos con el 99,99% de los votos contados, frente al 36,51% de Mesa.

 

El viceministro de Presupuesto y Contabilidad Fiscal, Jaime Duran, dijo que la conflictividad de los últimos días «sin duda» tendrá un efecto sobre la economía, que sin embargo «tiene una gran capacidad de respuesta».

 

«Se ve con absoluta claridad que la capacidad de respuesta se ve en el normal abastecimiento, tanto de carburantes, tanto de alimentos», agregó Duran el viernes en declaraciones al canal Red Uno.

 

PAL