Las mesas de negociación entre el gabinete de la primera ministra conservadora, Theresa May, y el Partido Laborista -el segundo con mayor presencia en la Cámara de Comunes, encabezado por Jeremy Corbyn-, se reanudaron ayer. Sin embargo, según varios medios británicos, la probabilidad de que estas reuniones produzcan un acuerdo bipartidista que convenza a las alas pro-Unión Europea y pro-Brexit de estos dos partidos, son aún bajas.

Las opciones a seguir, en caso de un punto muerto, sería someter a votación parlamentaria las alternativas a dicho estancamiento. En este escenario, las opciones de un segundo referéndum con la opción a frenar el Brexit por completo o una nueva elección general que produzca un nuevo primer ministro, podrían generar más adeptos en la Cámara Baja.

Estas negociaciones se han dado en medio de diversos llamados para la pronta renuncia de May, desde su propio partido, el Conservador.
Por ejemplo, Sir Thomas Brady, líder de la bancada conservadora de parlamentarios sin puesto en el gobierno, también conocida como el “Comité 1922”, pidió crear una línea de tiempo que fije una fecha de salida para May.

Asimismo, el descontento conservador con el manejo de May del proceso del Brexit se agudizó esta semana, con la renuncia de dos funcionarias del gobierno, ambas baronesas e integrantes de la Cámara de los Lores: Rona Fairhead, ministra de Comercio; y Zahida Manzoor, enlace del gobierno con el Parlamento. Si bien ambas argumentaron “razones personales”, con estas dos bajas, las renuncias o despidos en el gobierno de May desde la elección general de 2017 (en la que la conservadora derrotó a Corbyn), suman más de 30.

Por otra parte, el líder del recién presentado Partido Brexit, el ex conservador y euroescéptico Nigel Farage, declaró que si su agrupación es la más votada entre las opciones británicas en las elecciones parlamentarias europeas del próximo 23 de mayo, eso equivaldría a un visto bueno para un Brexit bajo la reglas de la Organización Mundial de Comercio y, por ende, su partido merecería estar presente en las negociaciones del gobierno con Bruselas.

Según el agregador de encuestas del sitio web Político, al 30 de abril pasado el partido de Farage se proyectaba como la agrupación británica más exitosa con el 27% de la eventual votación (unos 16 asientos), contra 23% del Partido Laborista y 4% para el Conservador.

RU participará en elecciones europeas

El Reino Unido (RU) tendrá que participar en las elecciones al Parlamento Europeo el 23 de mayo, ya que no hay suficiente tiempo para que se ratifique un acuerdo de salida antes de esa fecha, dijo ayer la primera ministra, Theresa May.

May intentó evitar la participación en los comicios europeos, pero hasta ahora las conversaciones con la oposición del Partido Laborista para encontrar una manera de avanzar sobre el proceso del Brexit no han logrado romper el punto muerto de las negociaciones.

«Lamentablemente, no será posible finalizar ese proceso antes de la fecha legalmente prevista para las elecciones parlamentarias europeas (…) así que ahora seguirán adelante», anunció a la prensa David Lidington, ministro de la Oficina del Gabinete, «lo ideal sería una situación en la que los eurodiputados del Reino Unido nunca ocupen sus escaños en el Parlamento».

LEG