WASGHINGTON.- Un 56 % de los estadounidenses rechaza la respuesta del presidente Donald Trump a la violencia racista en Charlottesville, Virginia, del 12 de agosto, mientras que el 62% de los republicanos la apoya, según un sondeo del Washington Post y la cadena ABC publicado hoy.

 

En la encuesta, efectuada entre el 16 y el 20 de agosto, se preguntó a 1,014 ciudadanos si aprueban o desaprueban la ambigua respuesta del mandatario, muy criticada incluso por líderes de su partido en Washington y grandes empresarios.

 

El 12 de agosto, tras horas de exhibición de símbolos fascistas en una concentración de grupos supremacistas, un manifestante neonazi arrolló con su vehículo una contramarcha antirracista, matando a una joven e hiriendo a 19 personas.

 

El país esperaba una condena inequívoca de su presidente a los grupos supremacistas, pero lo que dijo Trump es que había «violencia y odio» en «muchos lados», un mensaje que reafirmó tres días después a pesar de las críticas.

 

El 56 % de los estadounidenses rechaza esa respuesta, frente al 28 % que la aprueba, según el sondeo, que tiene un margen de error de 3.5 puntos porcentuales.

 

La diferencia de esa percepción entre demócratas y republicanos es abismal: el 6 % de los demócratas aprueba la reacción de Trump (el 84 % la desaprueba), mientras que el 62 % de los republicanos la aplaude (y el 19 % la rechaza).

 

Este sondeo indica que la base de votantes que hizo presidente al magnate se ha mantenido fiel durante la que muchos analistas consideran su peor semana en la Casa Blanca.

 

De hecho, algunas voces apuntaron la semana pasada a que Trump evita cargar contra los grupos supremacistas porque sus simpatizantes le apoyaron desde el principio de su campaña.

 

Trump se pronunció tres veces la semana pasada sobre los sucesos de Charlottesville.

 

El pasado lunes, forzado por las críticas y en un discurso escrito por su equipo, trató de calmar las aguas condenando explícitamente al «Ku Klux Klan (KKK), los neonazis, los supremacistas blancos y otros grupos de odio» y diciendo que «el racismo es el mal».

 

Pero al día siguiente volvió a su postura inicial de que la culpa de la violencia en Charlottesville la tienen «ambas partes» y, además, defendió que en la concentración supremacista también había «muy buena gente», cruzando una línea que fue demasiado incluso para muchos políticos de su partido.

 

Experto militar, nuevo embajador de Rusia en EU

MOSCÚ.- El presidente ruso, Vladímir Putin, nombró al experto en desarme y actividades militares Anatoli Antónov embajador de Rusia en Estados Unidos, en sustitución de Serguéi Kislyak, según el decreto difundido ayer por el Kremlin.

 

Antónov, hasta ahora viceministro de Asuntos Exteriores, es designado en un momento de crisis entre ambos países por la supuesta injerencia rusa en las elecciones presidenciales estadunidenses del año pasado.

 

El nuevo embajador ruso llega a Washington, además, en medio de controversia, pues en 2015 fue incluido por la Unión Europea (UE) en la lista de sancionados por la política de Moscú hacia Ucrania.

 

Era entonces viceministro de Defensa, por lo que, según Bruselas, estuvo implicado en el despliegue de tropas rusas en Ucrania y la anexión de Crimea.

 

En ese ministerio permaneció hasta diciembre de 2016, cuando regresó a Exteriores como viceministro, lo que algunos expertos consideran que era un paso necesario para poderle nombrar después embajador.

 

Según expertos politólogos, Antónov tiene gran experiencia en mantener conversaciones con responsables de EU, especialmente en el campo del control armamentístico y actividades militares.

 

También sustituye a Kislyak como representante de Rusia ante la OEA.

 

caem