El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, conversó telefónicamente con Nicolás Maduro, presidente de Venezuela, solicitando una amplia presencia de observadores internacionales en las elecciones presidenciales de julio en Venezuela.
Este llamado se da tras la retirada de la invitación a la Unión Europea para observar los comicios, por lo que Lula reafirmó el respaldo brasileño a los acuerdos de Barbados, destacando la importancia de la observación internacional. Además, expresó su deseo de que se levanten las sanciones internacionales para facilitar un proceso electoral en un clima de confianza.
En cuanto a los candidatos, Maduro se enfrenta a Edmundo González Urrutia, tras el bloqueo de candidaturas opositoras. La invitación inicial a la UE para observar las elecciones fue deshecha por el Consejo Nacional Electoral después de que la UE ratificara sanciones contra funcionarios del gobierno de Maduro.
La líder opositora venezolana, María Corina Machado, criticó esta decisión, acusando a Maduro de temer a la observación internacional. La candidatura de González Urrutia surgió tras la exclusión de una candidata designada por Machado, situación que Lula calificó previamente como “grave”.
En la conversación, Lula y Maduro también abordaron temas como las relaciones bilaterales, el interés empresarial brasileño en Venezuela, la renegociación de la deuda y la protección del pueblo indígena yanomami en la frontera entre ambos países.
