La primera ministra británica, Theresa May, insistió hoy en el Parlamento en que el Reino Unido estará «mejor» con el plan del «brexit» que ella ha negociado y descartó que el país vaya a ser «más pobre en el futuro».
En la sesión semanal de preguntas a la Jefa del Gobierno en la Cámara de los Comunes, May recalcó que el pacto del «brexit», respaldado el domingo por los 27 en Bruselas, es el «mejor disponible» para proteger los empleos y la economía.
Un informe del Gobierno divulgado hoy señala que una salida británica de la Unión Europea (UE) sin acuerdo reduciría el Producto Interior Bruto (PIB) del país un 9,3 % en 15 años, mientras que el tratado propuesto por May limitaría el impacto a un 3,9 %.
El documento del «brexit» que la Cámara de los Comunes votará el próximo 11 de diciembre permite, puntualizó la primera ministra, respetar el resultado del referéndum del 23 de junio de 2016 y aprovechar las oportunidades que se le presenten al país una vez que abandone el bloque europeo, el 29 de marzo de 2019.
«Este análisis (del Gobierno) no muestra que vayamos a ser más pobres en el futuro de lo que lo somos hoy, no lo dice; lo que muestra es que estaremos mejor con este acuerdo» negociado por el Ejecutivo conservador, puntualizó la primera ministra.
May agregó en los Comunes que son el líder laborista, Jeremy Corbyn, y el portavoz laborista de Economía, John McDonnell, los que suponen «el mayor riesgo para nuestra economía».
Por su parte, Corbyn afirmó en la Cámara baja que el plan del «brexit» consensuado entre Londres y Bruselas es el «peor» posible y, por ello, reiteró que su partido no lo apoyará.
«No es difícil que sea el mejor acuerdo si se trata del único acuerdo», dijo Corbyn en medio de las risas de los diputados británicos, en alusión a que no se ha ofrecido ninguna otra opción de negociación.
El ministro británico de Economía, Philip Hammond, señaló hoy a los medios que una salida del Reino Unido de la UE sin consenso tendría «un mayor impacto en la economía» que si se aprueba el plan del «brexit» negociado por la primera ministra.
Hammond reconoció, no obstante, que en «términos puramente económicos habrá un coste por la salida de la Unión Europea, pero que el objetivo es limitar esas pérdidas.
Varios diputados conservadores euroescépticos, la oposición laborista y el Partido Democrático Unionista (DUP) de Irlanda del Norte ya han manifestado su oposición al pacto y se espera que voten en contra en la Cámara de los Comunes el 11 de diciembre. EFE
jhs