Israel atacó el sur de la Franja de Gaza entre la noche del lunes al martes, tras el lanzamiento de globos incendiarios a su territorio desde el enclave palestino, lo que causó algunos incendios en matorrales.
“Los aviones de caza apuntaron en la noche a un taller de fabricación de cohetes de Hamás y un terreno militar en Jan Yunis, en el sur de la Franja de Gaza”, difundió el Ejército israelí.
Precisó que los ataques fueron en represalia por los balones lanzados a territorio israelí por el movimiento islamista Hamás, en el poder en Gaza.
Según una fuente de seguridad palestina en Gaza, varios misiles cayeron sobre un campo de entrenamiento del brazo armado de Hamás en Jan Yunis. Los ataques no dejaron víctimas, según fuentes médicas en Gaza.
El intercambio de ataques ocurrió tras la fuga de seis presos palestinos de una cárcel israelí, en su mayoría miembros de la Yihad Islámica, un grupo armado que opera en Gaza.
«El bombardeo sionista en la Franja de Gaza es un intento de la ocupación (Israel) de disimular su incapacidad de enfrentar la lucha de nuestro pueblo, en particular luego de la operación heroica en curso» con la fuga de los seis palestinos, dijo Hazem Qassem, portavoz de Hamás, en un comunicado.
Y es que seis palestinos, entre ellos un exjefe de un grupo armado, se fugaron de una prisión del norte de Israel a través de un túnel cavado bajo un lavabo, lo que desencadenó una masiva operación de búsqueda.
En un comunicado, el servicio de prisiones de Israel (IPS), indicó que la alerta se activó en la madrugada tras recibir informaciones de «siluetas sospechosas» alrededor de la prisión Gilboa y desató una operación de búsqueda de la Policía. Imágenes de los servicios penitenciarios muestran un túnel excavado debajo de una baldosa del cuarto de baño, al pie de un lavabo. Autoridades indicaron que estaban reubicando a los 400 presos de Gilboa.
LEG