La Comisión de Cambios, un ente integrado por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) y Banco de México (Banxico), inyectó 200 millones de dólares diarios para detener la depreciación del peso y el golpeteo de los especuladores.

 

“A partir del 9 de diciembre, y hasta nuevo aviso, el Banco de México ofrecerá diariamente 200 millones de dólares mediante subastas a un tipo de cambio mínimo equivalente al tipo de cambio FIX determinado el día hábil inmediato anterior conforme a las disposiciones del Banco de México más 1.5%”, señaló el órgano presidido por Luis Videgaray, titular de la SHCP.

 

Hasta la semana pasada, el secretario de Hacienda no veía la necesidad de una intervención. «Mientras el mercado cambiario tenga orden, tenga liquidez, como claramente lo tiene, la autoridad -tanto el Banco de México como la Secretaría de Hacienda- no intervendremos el mercado porque finalmente el precio del dólar lo determina el mercado, la oferta y la demanda», dijo en una entrevista radiofónica.

 

El peso ha perdido este año 10% de su valor frente al dólar para cotizar en un mínimo de 14.457, su peor nivel en más de dos años y medio. Este lunes, el tipo de cambio interbancario a 48 horas terminó la sesión en14.34 pesos por dólar, de acuerdo con el Banxico.

 

En este marco, la Comisión de Cambios informó que la subasta resultará en asignaciones únicamente cuando el tipo de cambio presente una depreciación, entre sesiones, cuando menos de 1.5%, precisó.

 

“Este instrumento ya se ha utilizado con éxito en otros episodios de volatilidad transitoria en los mercados financieros, siendo su objetivo principal proveer de liquidez al mercado cambiario en caso de que ello llegare a ser necesario”, afirmó la Comisión.

 

El 30 de noviembre de 2011 fue la última vez que se instauró la intervención del mercado cambiario, cuando Banxico comenzó a subastar diariamente 400 millones de dólares, siempre que el tipo de cambio superara en 2% el correspondiente al del día hábil inmediato anterior. La medida fue cancelada el 9 de abril de 2013.

 

Riesgoso, una eventual alza en tasas

 

Un eventual incremento de las tasas de interés ante el debilitamiento del peso, como lo sugirió Agustín Carstens, gobernador del Banxico, le pegaría al crecimiento de la economía mexicana, advirtieron analistas.

 

“Es una medida difícil, porque no tiene un impacto positivo en la economía, y más bien será una medida como remedio por la depreciación del peso”, afirmó José Isaac Velasco Orozco, gerente en economía del Grupo Financiero Ve por Más (Bx+).

 

“Un ajuste a la alza de las tasas de interés puede retrasar la convergencia hacia el producto potencial, es decir el crecimiento económico para los próximos trimestres podría desacelerarse”, manifestó el economista.

 

Agregó que el producto potencial del crecimiento de la economía seguirá en terreno negativo, en caso de que aumenten las tasas, incluso ya lleva varios trimestres avanzando muy por debajo.

 

“Hemos visto en otros bancos centrales donde se ven algunos movimientos desordenados en los cambiarios, vemos una flotación en las divisas. El caso más reciente se vio en Brasil donde comenzó un ciclo de alza en tasas de interés por la deprecación del real”, apuntó Velasco Orozco.

 

Eduardo Ávila Vargas, subdirector de análisis económico del Grupo Financiero Monex, señaló que un tipo de cambio débil como el que tenemos actualmente solamente favorece a las exportaciones, que son un motor del Producto Interno Bruto (PIB), por lo que un alza de las tasa de interés puede afectar a parte de esos motores de crecimiento del país.