El presidente de la comisión de Trabajo y Previsión Social del Senado, Napoleón Gómez Urrutia, hizo un llamado a la Secretaría del ramo, a garantizar que el recuento para elegirá sus líderes sindicales en la empresa de Arneses y Accesorios, de Grupo Industrial PKC, en Ciudad Acuña, Coahuila, se lleve a cabo en apego a la legalidad y en calma, “ya que representa una gran prueba para cumplir con la recién aprobada reforma laboral, en materia de democracia y libertad sindical”.
El también líder del Sindicato Nacional de Trabajadores Mineros, Metalúrgicos, Siderúrgicos y Similares de la República Mexicana, explicó que este jueves, los 5 mil 641 trabajadores podrán elegir en total libertad a la organización que represente sus intereses, entre una sección afiliada a la Confederación de Trabajadores de México (CTM) del estado, y la sección 307 del gremio minero, y cuyo proceso contará con observadores de sindicatos de Estados Unidos y Canadá.
Denunció que a pesar de que el recuento se realizará en la guarnición militar de ese municipio, existe el temor de que los afiliados a la CTM violenten el procedimiento, como ocurrió en el recuento del 29 de noviembre del año pasado, que dejó varios lesionados y por lo cual la Junta de Conciliación y Arbitraje tuvo que suspenderlo.
“No podemos regresar a la historia del sindicalismo anticuado reaccionario de golpeadores que impidan la libertad de sindicación y la voluntad libre y democrática de los trabajadores que tienen un derecho universal de decidir por sí mismos, no las empresas, no los gobiernos y a qué organización sindical pertenecen y elegir a sus propios dirigentes”, señaló la organización de mineros que preside Gómez Urrutia.
Denunció que previo al recuento, los observadores internacionales comentaron que “las huestes cetemistas empezaron a hostigar y acosar a los trabajadores para que voten a su favor, e incluso ofrecen dádivas económicas en aparente colusión con la empresa”.
La planta PKC es una de las más importantes en la producción de autopartes para casi la totalidad de las plantas armadoras de vehículos del país, lo que hace de mayor relevancia que prevalezca la legalidad, la democracia y la libertad sindical y se destierren en definitiva prácticas «gansteriles» a las que está acostumbrada la CTM para obtener los contratos colectivos.
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