BRUSELAS. El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, le pidió a su par de Rusia, Vladirmir Putin, que "cese el apoyo y el flujo de armas a los separatistas" prorrusos en el este de Europa y le sugirió que "aproveche la oportunidad" y negocie una salida a la crisis separatista que afecta a Ucrania con el nuevo presidente electo de ese país, Petro Poroshenko
Al finalizar la rueda de prensa de la cumbre del G7, en Bruselas, Barack Obama envió un mensaje a Vladimir Putin, ausente en esa reunión: "Tiene la oportunidad de volver al camino de la legalidad internacional. Puede negociar directamente con el presidente Poroshenko".
"Que aproveche la oportunidad y que reconozca que Poroshenko es el legítimo líder de Ucrania y cese el apoyo a los separatistas y el flujo de armas", enfatizó el titular de la Casa Blanca.
Por otra parte, las autoridades fronterizas ucranianas reconocieron que están perdiendo el control de la frontera con Rusia en las regiones rebeldes de Donetsk y Lugansk, motivo por el que ha tenido que cerrar hasta tres puestos fronterizos, alegando la extrema escalada de conflicto a la que guardias fronterizos y sus familias se han visto sometidos durante más de dos días de combates contra prorrusos.
Por el momento se cerraron dos de nueve pasos de automóviles y uno de tres pasos de tren en la región de Lugansk. Las autoridades informaron en un comunicado que ante la "concentración de un gran número de terroristas en las zonas cercanas a la frontera y en las localidades de Krasnodon y Sverdlovsk" es difícil "mantener el control sobre la línea fronteriza en algunos lugares".
Mientras tanto, en Donetsk cientos de miles de personas de cinco ciudades controladas por los prorrusos se quedaron sin suministro de agua al resultar dañado un conducto, informó la oficina de protección civil ucraniana en Kiev.
Rusia denuncia desde hace días la situación que afecta a la región y exige la creación de un corredor humanitario para ayudar a los más necesitados. Unas cuatro mil personas solicitaron estatus de refugiados a Rusia, informó el jefe de gobierno Dmitri Medvedev. EFE