Edward Snowden es el joven de 29 años responsable de la más grande filtración de inteligencia en la historia de Estados Unidos, explicó a The Guardian sus motivos, su incierto futuro y por qué nunca intentó ocultarse en la sombra. Fue asistente técnico de la Agencia Central de Inteligencia y actual empleado de la contratista de defensa Booz Allen Hamilton. Snowden ha trabajado para la NSA por cuatro años como empleado de varios contratistas. Tras varios días de entrevistas y a su solicitud, The Guardian reveló su identidad. Desde el momento en que decidió hacer públicos múltiples documentos top secret estaba determinado a no buscar la protección del anonimato. “No tengo intención de esconder lo que soy porque no he hecho nada malo”, dijo. Snowden pasará a la historia como uno de los informantes estadunidenses más consecuentes, junto con Daniel Ellsberg y Bradley Manning. Él es responsable por difundir material de una de las organizaciones más secretas: la NSA.
Entre sus afirmaciones, Snowden dice que su único motivo “es informar al público de lo que se hace en su nombre y lo que se hace en contra de ellos”. Él llevaba una vida confortable con un salario cercano a los 200 mil dólares anuales, una novia con la que compartía su casa en Hawaii, una carrera estable y una familia a la que ama. “Estoy dispuesto a sacrificarlo todo porque no tengo conciencia para permitir que el gobierno de Estados Unidos destruya la privacidad, la libertad de internet y las libertades básicas para la gente en todo el mundo con esta maquinaria de vigilancia masiva que están construyendo en secreto”, dijo a The Guardian este domingo.