Luego de que finalmente el Gobierno del Distrito Federal (GDF) diera a conocer de manera puntual el proyecto del Corredor Cultural Chapultepec, distintos expertos en urbanismo expresaron su desagrado al considerar que la propuesta de intervención de la avenida sólo va a privatizar la calle y crear un centro comercial.
Lo anterior toda vez que la concesión que el Gobierno estaría entregando al inversionista, Invex, es por 40 años y sólo el 5% de los ingresos que genere el corredor serán pagados al Gobierno capitalino por concepto de contraprestación.
El desagrado llevó a los inconformes a crear una campaña contra el proyecto que lleva por nombre #NoShopultepec, en referencia a que supuestamente la avenida sería convertida en un centro comercial disfrazado de parque lineal, beneficiando sólo a los inversionistas y no a los ciudadanos.
“El gobierno quiere construir un centro comercial en la vía pública y un parque elevado (segundo piso) en la avenida Chapultepec de la Ciudad de México. Sin consulta ni concursos públicos, ya asignó la obra.
“La vida de las millones de personas será modificada por una decisión que separará colonias, privatizará el espacio público, provocará más inseguridad y privilegia al automóvil”, se lee en una petición que circula por internet.
Aunque el proyecto del Corredor Cultural Chapultepec no plantea ningún cambio mayor a la infraestructura vial que hoy se encuentra en esa avenida, el Jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera, señaló que se trata de una obra 100% peatonal.
Ayer, ante la pregunta de la prensa sobre si la ciudadanía gana algo con la construcción del parque lineal elevado, Mancera respondió: “primero ganas en el mejoramiento de la calle, y segundo, en un espacio que es absolutamente peatonal”.
Expertos en movilidad y urbanismo como Salvador Medina o Daniel Gershenson acusaron que el Corredor Cultural Chapultepec sería una manera de privatizar la calle otorgando terreno a inversionistas privados en una zona de alto valor comercial y residencial.
Otro aspecto que levantó polémica fue que cinco meses después de las asignación del proyecto y ya elaborada la propuesta conceptual, la empresa paraestatal ProCDMX decidiera transparentar el Corredor Cultural Chapultepec y lo abra a la opinión de la ciudadanía.
“Los ciudadanos no son más espectadores, son los actores fundamentales en Hacer Ciudad”, escribió en Twitter el director de ProCDMX, Simón Levy, a lo que el arquitecto y urbanista Rodrigo Díaz, respondió: “bonitas palabras. Para ello se necesita participación antes de las decisiones, no después de hechos consumados”.