El Gobierno de la Ciudad de México no dobló las manos al reubicar la Mega Rueda de la Fortuna a un costado del Auditoria Nacional, sino que atendió la demanda ciudadana que se oponía a que estuviera a un lado del Museo de Arte Moderno.
Así lo expresó el grupo parlamentario del Partido de la Revolución Democrática (PRD) en la Asamblea Legislativa, el cual destacó la voluntad del gobierno capitalino de escuchar y atender la demanda ciudadana.
En conferencia de prensa, el líder de la bancada perredista, Leonel Luna Estrada, consideró que la decisión del jefe de gobierno, Miguel Ángel Mancera, de reubicar dicho juego electromecánico muestra la voluntad de gobernar de una manera distinta.
Declaró que de acuerdo al expediente que conocieron los asambleístas del PRD sobre la mega rueda de la fortuna, no se requerían permisos del INBA ni del INAH, porque no se trataba de una modificación patrimonial, por lo que las autoridades capitalinas no estaban realizando afectación alguna.
Reiteró que es de destacarse la actitud del gobierno de la ciudad, al atender la demanda ciudadana para trasladar este proyecto turístico a un estacionamiento que está ubicado atrás del Auditorio Nacional.
Explicó que se trata de un estacionamiento que no se utilizaba porque estaba en litigio desde hace 10 años y se encontraba prácticamente abandonado, por ello, ahora que se recuperó, debe dársele un uso útil para los capitalinos.
El también presidente de la Comisión de Gobierno de la ALDF expuso que se trataba de una zona desperdiciada, donde incluso se pretendió abrir espacios para los comerciantes ambulantes en la administración de Andrés Manuel López Obrador.
Se trata, dijo, de una inversión que se hizo y que sin embargo, al entrar en litigio, simplemente se desperdició, por lo que al poner ahí la rueda de la fortuna servirá para rescatar esa toda esa zona.