No hay nada que enriquezca más la vida de un ser humano que hacer lo que le gusta, y es por eso que Anita Hernández, se considera verdaderamente afortunada, pues la pasión y entrega con la que realiza su labor en uno de los destinos más privilegiados y premiados de México le ha dado la posibilidad de realizar lo que siempre ha anhelado, hacer tributo a México