La misa es una de las pocas del año en las que el Papa no está a cargo del sermón, que quedó en manos del padre Raniero Cantalamessa, cuyo título es predicador de la sede papal
La misa es una de las pocas del año en las que el Papa no está a cargo del sermón, que quedó en manos del padre Raniero Cantalamessa, cuyo título es predicador de la sede papal