El expelotero mexicano salió en libertad, pero se le exigió entregar su pasaporte y el juez le advirtió que en caso de huir, la propiedad de Texas con valor de 160 mil dólares sería confiscada
El expelotero mexicano salió en libertad, pero se le exigió entregar su pasaporte y el juez le advirtió que en caso de huir, la propiedad de Texas con valor de 160 mil dólares sería confiscada