José Luis Pérez Tapia, estudiante de la carrera de Administración de Empresas, fue engañado por una empresa que ofertaba una vacante como auxiliar administrativo, con un sueldo de tres mil pesos semanales; sin embargo, lo pusieron a vender perfumes
José Luis Pérez Tapia, estudiante de la carrera de Administración de Empresas, fue engañado por una empresa que ofertaba una vacante como auxiliar administrativo, con un sueldo de tres mil pesos semanales; sin embargo, lo pusieron a vender perfumes