En el estadio Marassi, el Génova consiguió la permanencia matemática gracias al triunfo por 2-1 contra el Torino, determinado por los goles de Luca Rigoni y de Simeone, que celebró esta tarde su duodécimo tanto del año
En el estadio Marassi, el Génova consiguió la permanencia matemática gracias al triunfo por 2-1 contra el Torino, determinado por los goles de Luca Rigoni y de Simeone, que celebró esta tarde su duodécimo tanto del año