Ahora el presidente suspendido enfrenta un cargo oficial por un delito de carácter sexual, que puede llevarlo a una pena de entre uno y cuatro años de cárcel, tras no haber consentimiento de la víctima
Ahora el presidente suspendido enfrenta un cargo oficial por un delito de carácter sexual, que puede llevarlo a una pena de entre uno y cuatro años de cárcel, tras no haber consentimiento de la víctima