El mandatario estadounidense acusó a los demócratas de “ser malos para el país” y “oponerse” de manera constante a sus propuestas en el Congreso, pese a que la mayoría legislativa está en manos de los miembros de su propio partido, el republicano.
El mandatario estadounidense acusó a los demócratas de “ser malos para el país” y “oponerse” de manera constante a sus propuestas en el Congreso, pese a que la mayoría legislativa está en manos de los miembros de su propio partido, el republicano.