Las paredes de la Tate Modern lucen atiborradas de imágenes que incluyen desde los clásicos retratos hasta objetos abstractos tal y como estarían expuestos en las casas del artista británico
Las paredes de la Tate Modern lucen atiborradas de imágenes que incluyen desde los clásicos retratos hasta objetos abstractos tal y como estarían expuestos en las casas del artista británico