Cada cuatro años, los Juegos Olímpicos cuentan con su propia mascota. Estos personajes, con una simbología e historia de trasfondo está encargado de representar tanto al país anfitrión, como sus valores.
Cada cuatro años, los Juegos Olímpicos cuentan con su propia mascota. Estos personajes, con una simbología e historia de trasfondo está encargado de representar tanto al país anfitrión, como sus valores.