Los testigos lo describen como un hombre culto y amable, que no bebía alcohol ni tomaba drogas y que solía ser visto con aspecto aseado y cuidado, por la biblioteca y cafeterías del centro
Los testigos lo describen como un hombre culto y amable, que no bebía alcohol ni tomaba drogas y que solía ser visto con aspecto aseado y cuidado, por la biblioteca y cafeterías del centro