El 8 de agosto de 1963 se perpetró uno de los golpes más limpios; uno de los cerebros de la operación, Ronnie biggs, discapacitado y casi mudo afirma sentirse orgulloso
El 8 de agosto de 1963 se perpetró uno de los golpes más limpios; uno de los cerebros de la operación, Ronnie biggs, discapacitado y casi mudo afirma sentirse orgulloso