Mientras restaurantes, cafés, galerías de arte y centros culturales florecen en sus bordes, en el centro del camellón, las fuentes y estatuas de bronce claman por su restauración y mantenimiento
Mientras restaurantes, cafés, galerías de arte y centros culturales florecen en sus bordes, en el centro del camellón, las fuentes y estatuas de bronce claman por su restauración y mantenimiento