Desde Turquía, ayer llegaron los elementos del Ejército, Marina Armada y Cruz Roja Mexicana que acudieron a apoyar en labores de búsqueda y rescate, tras el terremoto de 7.8 de magnitud que ocurrió en ese país; con ellos, llegaron los restos de Proteo, el soldado canino que falleció en aquélla región.
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El avión de la Fuerza Áerea que trajo a los rescatistas y a los elementos canófilos aterrizó en la Base Aérea Militar N. 1, contigua al Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), donde fue recibido con honores, especialmente el cuerpo de Proteo, que llegó en una caja de madera custodiada por una guardia.
Tras la guardia, conformada por cuatro binomios canófilos, el ataúd de Proteo fue despedido entre los ladridos de sus compañeros caninos, mientras la caja de madera era cargada por elementos de Ejército.
La delegación mexicana en Turquía estuvo conformada por 93 elementos del Ejército, apoyados por marinos y rescatistas de la Cruz Roja.
En esa región de Asia Occidental se calcula que el terremoto dejó más de 40 mil personas fallecidas.
LEG