Vicente Fox, ya como Presidente, se ofreció a mediar entre las dos Coreas para alcanzar la paz; como candidato, prometió solucionar “en 15 días’’ el conflicto armado en Chiapas.

Claudia Sheinbaum confesó que de niña soñaba con acabar la guerra entre Vietnam y Estados Unidos.

Andrés Manuel López Obrador propuso, primero, rescatar la economía mundial pidiendo a los mil empresarios más ricos y a las mil empresas más poderosas del planeta “donar’’ 4% de sus utilidades anuales para distribuir entre los países más pobres.

La propuesta la hizo en la ONU.

El pasado día 16, el mandatario mexicano presentó un “plan para la paz’’ mundial, enfocado en el conflicto bélico entre Rusia y Ucrania.

Básicamente, López Obrador propuso una tregua militar por cinco años y que el primer ministro de la India, Narendra Modi, mediara entre ambos países.

Nadie sabe si el Presidente mexicano le pidió autorización a Modi para aventarlo a los leones o si fue una ocurrencia.

Lo que no se esperaba López Obrador, es que Myjailo Podolyak (@Podolyak_M), asesor del Jefe de la Oficina del Presidente de Ucrania Volodymyr Zelensky, acusara que el plan ofrecido por el Presidente mexicano era en realidad “un plan ruso’’.

“‘Pacificadores’ que usan la guerra para sus propias RP solo sorprenden. @lopezobrador_.Si ¿su plan es mantener a millones bajo la ocupación, aumentar las fosas comunes y dar tiempo a Rusia para renovar sus reservas antes de la próxima ofensiva?, entonces es un plan ruso. Fuerte.’’, escribió.

Pero, fiel a su costumbre, López Obrador no se quedó callado y ayer respondió que su plan para la paz en esa región “es desechado debido a sectarismos e intereses de élite’’.

¿Sectarismos de quién? ¿Intereses de quién? ¿A quién acusa el mandatario mexicano de querer mantener una guerra?

Puede ser que el dichoso plan de AMLO sea un distractor más (cómo si al país le faltaran problemas para involucrarnos en otro) o una ocurrencia que consideró genial para hacerse camino al Nobel de la Paz.

Pero, López Obrador no ha sido distinto a lo que en su momento desearon y promovieron otros presidentes: Luis Echeverría soñaba con presidir la ONU; Carlos Salinas con presidir la OMC, para lo que trabajó durante su sexenio; Fox anhelaba el reconocimiento internacional por haber sido el primer Presidente de oposición en el país.

Pero insiste en que “no son iguales’’.

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En tiempos en los que los órganos electorales del mundo (sobre todo en México), resisten embates desde el Gobierno que atentan contra su existencia, el INE será sede, mañana, de la Cumbre Global de la Democracia Electoral que llevará por título “El papel de los organismos electorales en su fortalecimiento’’.

Toda una pléyade de académicos internacionales, funcionarios de organismos electorales de los países considerados más democráticos del orbe, estarán en nuestro país para hablar de los riesgos que corre la democracia ante el avance del populismo.

La Cumbre es la conclusión de cinco foros continentales que se realizaron entre julio y agosto de este año.

Las conclusiones de esos foros, de las que hablaremos mañana, son de verdad reveladoras.

Suerte.

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Por cierto, el canciller Marcelo Ebrard estaba programado para inaugurar la Cumbre, pero ayer estaba en los funerales de la Reina Isabel II, por lo que se duda que pueda asistir.

Hubiera sido muy interesante escuchar los conceptos de democracia y de los órganos electorales en voz de uno de los presidenciables con mayores simpatías entre las clases medias.

Será para la otra.

LEG