Si bien manifestó su respeto por las determinaciones que tome el movimiento estudiantil sobre suspender o continuar el paro indefinido en el Instituto Politécnico Nacional (IPN), la sección 60 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) respaldó la designación de un director general interino para el instituto.
En conferencia, el presidente de la comisión ejecutiva de la sección 60 del SNTE José Bernardo Quezada Salas, coincidió con la Secretaría de Educación Pública (SEP) en que la designación del director se tiene que hacer conforme a lo que establece el reglamento interno del IPN.
La postura del SNTE -que agrupa a 17 mil trabajadores académicos del IPN- es designar un interinato que termine el periodo actual (2012-2015); durante este tiempo se discutiría la refundación del instituto y los mecanismos para designar próximo director.
“No será un director que estará cumpliendo un proceso legal, será un interino que terminará el período de la administración anterior y en este proceso tendremos que discutir al interior todas las reformas que sean necesarias (…) cuál tendría que ser -a partir de ya- la forma de designar al futuro director general del Instituto”, señaló.
A pesar de haber manifestado una actitud “respetuosa” a la determinación de los estudiantes de mantener o suspender el paro de actividades, la postura oficial del sindicato es que “muchas” de sus demandas ya han sido resueltas.
También advirtió que si no se reponen las actividades de manera “inmediata”, los 168 mil estudiantes del Poli podrían perder el semestre.
“Entrar en un gran debate al interior de la institución que permita hablar no únicamente de los procesos académicos de los planes y programas, sino de los problemas de los trabajadores de apoyo de asistencia a la educación, de los académicos, de los estudiantes, de su Ley Orgánica, de todo lo que tiene que ver con una reingeniería”.
500 mdp para el sindicato
El pasado 26 de septiembre, el Sindicato envió un pliego petitorio de ocho puntos a la dirección general del IPN que incluía pago de bonos de transporte; de promoción docente, evaluación de categoría y compactación; un programa de basificación; incremento y recuperación de horas.
El 6 de octubre, seis días después de iniciado el paro estudiantil, la Secretaría de Gobernación aceptó cumplir las demandas del SNTE, mediante la entrega de una bolsa de 500 millones de pesos.
“Garantías de cumplimiento” para destrabar conflicto
La estrategia de la SEP para destrabar el conflicto que mantiene cerrado el IPN es primero sentar a los muchachos a dialogar, después apelar a que confíen en la institución y si no lo consiguen, darles garantías de cumplimiento.
Emilio Chuayffet Chemor, titular de la dependencia federal, delineó esta estrategia el viernes pasado durante una conferencia de prensa. Las garantías se basarían en el establecimiento de plazos y metas.
“Yo veo posible un camino de varias etapas, y la primera es entrar a la plática, a la negociación, al diálogo, a concretar a ver esto, cómo le hacemos, en los márgenes de la Ley, que eso está muy bien puesto”, señaló.
Desconfían de funcionarios “colmilludos”
Aunque en su sesión permanente, la Asamblea General Politécnica se perfiló hacia aceptar sentarse con el gobierno federal, la discusión giró en torno a exigir que esta sea impuesta bajo sus propias condiciones.
En principio de cuentas, los estudiantes temen “perder” por su falta de experiencia política ante el exceso de “colmillo” de los funcionarios del gobierno federal.
“Nos van a ganar por el colmillo que tienen”, señalaron los integrantes de la AGP.
Hasta el cierre de esta edición, habían acordado que solicitarán la participación de un moderador (propusieron al periodista Javier Solórzano). También propusieron que la mesa se lleve a cabo el 21 de octubre y que tenga una duración de tres días.
Los jóvenes también se mostraron preocupados por acelerar el proceso “el paro ya no aguanta mucho más”, coincidieron.